A veces la vida sorprende con giros que parecen sacados de una película. Lo que hace unos días era pura angustia, hoy se convirtió en esperanza y emoción. Thiago Medina, el querido ex participante de Gran Hermano, está protagonizando una recuperación que muchos califican como un verdadero milagro. Su pareja y madre de sus hijas, Daniela Celis, fue quien compartió la noticia que llenó de alegría a todos los que siguieron de cerca su delicado estado de salud.
Durante semanas, Daniela y la familia de Thiago mantuvieron encendidas las cadenas de oración y los mensajes de fuerza. Hoy, por suerte, las palabras que se escuchan son otras: “Se dio el milagro”, “se terminó la pesadilla”, “ahora sí que vamos a poder dormir”, “salió, salió, salió”, “gracias a la gente, nunca nos vamos a olvidar de todo lo que hicieron”. Esas frases, dichas con lágrimas de emoción, reflejan lo que se vive actualmente alrededor de la recuperación del joven.
Daniela Celis reveló el gran deseo de Thiago:
Entre sonrisas y alivio, Daniela Celis contó en el programa Patria y familia los detalles del avance de Thiago, y dejó a todos sin palabras. Cuando le consultaron “¿habla, se mueve, conversás?”, la ex GH no pudo ocultar su felicidad: “Habla, se mueve, camina….eh… de a poquito y con ayuda, está en rehabilitación claramente pero ya camina. Imagínense que su cuerpo estuvo mucho tiempo quieto”, expresó con orgullo.

Además, agregó que los progresos son lentos pero firmes. “También las manos como que las va abriendo de a poquito. Va comiendo solo porque hasta ayer le estaba dando de comer yo”, confesó con ternura. Cada pequeño paso es un motivo para celebrar, porque como ella misma explicó, “son todos pasitos chiquititos que siempre van para evolución”.
Sin embargo, el regreso de la energía de Thiago también trajo consigo un nuevo tipo de problema… los “dolores de cabeza” típicos de quien ya se siente mejor. Daniela lo contó con humor y mucha emoción: “Él tiene mucha fuerza de voluntad que eso es lo importante y lo fundamental para mí y para todos, si estás bien de ánimo y tu cabeza quiere, tu cabeza manda y tu cuerpo también, y él quiere ya salir de ahí, quiere el alta ya, y quiere estar en casa con las nenas. Es lo único que repite todo el tiempo. Pero bueno, falta un poquitito más para que esté todo bien y se la den, y ojalá sea pronto. Es todo un proceso”, cerró con esperanza.
Después de días de incertidumbre, el presente de Thiago es una muestra viva de superación, amor y fe. Su deseo de volver a casa con sus hijas demuestra que, a veces, las ganas de vivir pueden más que cualquier obstáculo. Y sí, esta vez, la palabra “milagro” parece tener nombre y apellido.