Hay momentos que cambian la mirada de cualquier padre, incluso de alguien acostumbrado a hacer reír como Martín Campilongo, más conocido como Campi. Durante un móvil en La mañana con Moria (El Trece), el humorista compartió una experiencia que lo desarmó emocionalmente, dejando ver un lado suyo que pocas veces se muestra en público.
Todo comenzó con una charla cotidiana con su hija Emma, de 18 años, que terminó en un instante cargado de ternura y sinceridad. “Anteayer mi hija Emma me hizo llorar. No puedo ni contarlo… porque me dijo: ‘Papá, para mí vos sos un sabio’. Me dijo eso y que le gusta hablar conmigo”, relató Campi con la voz quebrada, mientras las lágrimas afloraban.
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El humorista explicó cómo se dio el momento: “Estábamos hablando de algo mío de trabajo, y la veo que me revolea los ojos”. Confundido, le preguntó si lo estaba molestando, y Emma respondió de manera que lo sorprendió por completo: “Vos siempre pensás eso. En realidad, a mí me encanta hablar con vos porque sos muy sabio”.
La reacción de Campi fue inmediata y sincera: “Me desarmó, apretó una tecla y me largué a llorar. Me fui corriendo al baño porque me dio vergüenza”. Este episodio muestra la conexión profunda que mantiene con su hija, que lo elige como confidente y guía incluso siendo adolescente.
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La emoción se potencia al considerar su dinámica familiar con Denise Dumas. Juntos son padres de Emma y Francesca, y conviven con Isabella y Santino, hijos de Denise de una relación anterior. Una familia ensamblada que se enfrenta a los desafíos del día a día, pero que siempre intenta mantener la unidad, el cariño y la cercanía.
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Campi también reflexionó sobre el valor de la palabra y la atención que se le da a los hijos: “Uno se pregunta si está cansando, si está molestando, si llega… y de repente te dicen algo así y se te cae el mundo”.
Moria Casán, consciente de la sensibilidad del momento, lo acompañó y resaltó la importancia de los vínculos familiares y de mostrarse vulnerable, incluso frente a las cámaras. Sin dudas, este relato se convirtió en uno de los momentos más comentados del programa, dejando ver un lado de Campi sencillo, afectuoso y atravesado por el amor de padre.
