El programa Puro Show se ha convertido en una de las propuestas más fuertes de la televisión argentina, con Pampito y Matías Vázquez al frente, llevando lo mejor de la farándula a la pantalla de Canal Trece. En cada emisión, no solo revelan exclusivas impactantes, sino que también reciben a grandes figuras del espectáculo.
En esta ocasión, Aníbal Pachano fue el invitado especial y compartió una de las experiencias más difíciles de su vida. Todo comenzó cuando Matías Vázquez le dio pie a su relato, haciendo referencia al momento en que el artista recibió su diagnóstico: «Te enteraste que tenías HIV llegando a la Navidad. Es un mensaje claro porque hoy mucha gente no se cuida», señaló el conductor.
Pachano no dudó en contar en detalle cómo vivió ese momento. «A mí me había parecido una llaga en el lado izquierdo, en la parte interna de la boca. Trata de verla y se agrandaba, le ponía un producto para las encías y no servía. Pensé que había algo raro, yo no me había cuidado un par de veces y tenía un presentimiento», recordó con sinceridad.
Tras su consulta médica, recibió la noticia de una manera inesperada. «Cuando fui a hacerme los análisis tuve dos consultas, la médica del Italiano me lo explica con un cuentito divertido: ‘si lo tenés es crónico y si no lo tenés sirve para que se te abra la cabeza’. Voy a mi casa y decía ‘positivo’. Y yo dije ‘ay que suerte, no tengo nada’. Un burro, y era un intelectual importante», relató Pachano, remarcando su reacción inicial de negación.
A pesar de la difícil situación, siempre intentó afrontarla con una actitud resiliente. «Era una negación, se habían muerto muchos amigos míos, conocía la enfermedad. Yo estaba separado hace muchos años de Ana. Lo tomé desde ese lugar, entender que si te sucede algo hay que solucionarlo, no hacer un problema del problema», expresó con firmeza.
Además, vinculó este aprendizaje con otras experiencias de su vida. «Lo mismo me pasó a los cinco años cuando me operaron de una peritonitis galopante, que mi mamá me congela y logra que no se explote todo. Cuando mi mamá me lo contó fue desde un lugar tan esperanzador que creo que ahí fue como una señal de aprendizaje», confesó.
Finalmente, Pachano dejó un mensaje claro sobre la importancia de la coherencia y la fortaleza emocional en los momentos más duros: «Me parece que uno tiene que tener esa capacidad de ser resiliente, de poder sortear la situación y no pedir ni permiso ni disculpas. Cuando uno trabaja en serio con vocación vas a lograr siempre los objetivos, pero hay que ser coherente con lo que pensás. Y eso es lo que me voy a llevar en la vida, ser coherente», concluyó, visiblemente emocionado.
Este testimonio de superación y aprendizaje dejó a todos los presentes conmovidos y reafirmó el mensaje de que, incluso en las situaciones más difíciles, la actitud y la determinación pueden marcar la diferencia.
