“Fueron ellas”: El duro dato que confirmaron sobre las hijas de Jorge Lanata

El estado de salud de Jorge Lanata sigue siendo uno de los temas más preocupantes en los medios argentinos, pero lo que parecía ser solo una cuestión médica, ha escalado a un conflicto familiar y legal de proporciones inesperadas. Con casi cinco meses de internación, el periodista enfrenta no solo la lucha por su recuperación, sino también una disputa interna que involucra a sus hijas y a su entorno más cercano. La tensión se agudiza cada día, especialmente tras las últimas revelaciones hechas en el programa A la Barbarossa, conducido por Georgina Barbarossa en Telefe.
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En medio de este escándalo, fue la periodista Analía Franchin quien destapó detalles cruciales del enfrentamiento familiar que parece no tener fin. Según compartió, “Las hijas de Lanata tienen hasta el lunes, a las 15:30 horas, para pedir la recusación del nuevo juez, si quieren”. Esta declaración abre una nueva ventana al conflicto legal que rodea la figura del comunicador, que parece estar lejos de llegar a su resolución.

Franchin aclaró, sin embargo, que “No estoy diciendo que es esto es lo que quieren, pero si es su decisión, ese día se vence el plazo para solicitar esa medida”. Aunque las hijas de Lanata aún no han manifestado oposición al juez asignado, la situación está lejos de ser pacífica, lo que deja entrever la magnitud de la disputa en curso.

Por otro lado, Pía Shaw, compañera de Franchin, también comentó sobre la atmósfera familiar cargada de tensión. “Igual estamos hablando de dos bandos, por ponerle un nombre, que no se miran a la cara, donde cuentan que las chicas bajarían la mirada por todo lo que ha pasado”, sostuvo Shaw, haciendo alusión a la incomodidad y el distanciamiento emocional entre los involucrados.

Lo más impactante, sin embargo, es la información que Shaw reveló sobre los primeros pasos judiciales tomados por las hijas de Lanata. “Porque quienes primero fueron a la justicia, y después se filtraron esos videos y audios de Elba, fueron ellas”, destacó Shaw. La filtración de contenido privado relacionado con Elba, vinculada al entorno de Lanata, parece haber avivado las llamas del conflicto, transformándolo en un escándalo público.

En cuanto a la relación dentro del sanatorio, “en el sanatorio no hay contacto alguno porque se pusieron distintos horarios”, señaló Franchin, subrayando la ruptura total de comunicación entre los involucrados. Este distanciamiento resalta la gravedad del enfrentamiento, donde ni siquiera los momentos críticos parecen lograr unir a las partes en disputa.

 

Este nuevo giro en la historia de Jorge Lanata no solo muestra las tensiones familiares al descubierto, sino que también subraya la magnitud del conflicto que involucra a figuras cercanas al periodista. Mientras su salud sigue siendo un tema de preocupación, el escenario familiar parece estar cada vez más fracturado, y la resolución de este conflicto podría demorar aún más.

 

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