En una reciente emisión de “Almorzando con Juana”, el programa conducido por Juana Viale en Canal Trece, se vivió un momento cargado de emociones cuando la reconocida actriz Carola Reyna compartió una historia personal y profesional que dejó a todos los presentes en un profundo silencio. Reyna, invitada de lujo, habló sobre su unipersonal “Okasan, diario de viaje de una madre”, una obra que revela una historia íntima y cargada de significado, en la que se exploran temas como la distancia y el reencuentro entre una madre y su hijo.
“Estoy en un unipersonal por primera vez en mi vida, es fuertísimo”, declaró Carola, visiblemente conmovida, refiriéndose al desafío de llevar en solitario una pieza tan intensa. La obra, de una duración de 1:15 h, narra “el viaje de una madre cuyo único hijo se va a vivir a Japón”, una experiencia que permite adentrarse en la perspectiva de una madre que ve a su hijo después de un año sin poder hacerlo.
La actriz también compartió cómo llegó a identificarse con esta historia: “Los cambios de la vida… es muy lindo. Yo tengo un hijo que vive afuera”, confesó, revelando cómo una amiga le acercó la obra, sabiendo lo mucho que resonaría con su propia experiencia. “Me dijo que lo leía y era para mí”, recordó Carola, agradecida por esa oportunidad de plasmar en escena un sentimiento tan personal.
“Me sirvió para distanciarme un poco… cuando la leí me pegó, hizo blanco, fue fuertísimo”, expresó la actriz, relatando cómo el impacto de la obra fue inmediato, un golpe emocional en plena pandemia y en medio de la pérdida de su madre: Yo estaba en un sillón y fue como que… Fue clarísimo. Pero era plena pandemia, complicado, luego se murió mi mamá. Los tiempos del arte no son los tiempos de la agenda», aseveró.
Finalmente, el esfuerzo se concretó, y la obra salió a la luz. “Fue desde el deseo puro, estábamos felices del camino, felices de hacerla”, señaló Carola con entusiasmo. La pieza no solo cumple con un fin artístico, sino que también “éramos como la voz que unía a las personas con los seres que están lejos”, reflejando cómo el arte conecta sentimientos profundos. El Chino Leunis, también invitado, no pudo evitar emocionarse y agregó: “Yo me imagino la situación y se me parte el corazón”, capturando el sentimiento que resonó entre todos los presentes.