En medio del revuelo mediático que suele acompañar cada uno de sus pasos, Oriana Sabatini volvió al país y dejó mucho más que una postal en el aeropuerto. A más de un año de haberse casado con el futbolista Paulo Dybala, la artista argentina habló de todo: su presente sentimental, su carrera, su familia y los deseos que proyecta a futuro. Como siempre, con una mezcla de sinceridad y reserva que la caracteriza.
El futuro con Paulo: ¿un bebé?
Recién llegada a Ezeiza, Oriana fue interceptada por la prensa, y sin rodeos, compartió cómo se siente: “Estoy muy bien, vine a trabajar”, afirmó, mostrando que no descuida su carrera en Argentina pese a estar instalada en Europa.
La charla avanzó hacia su relación con Dybala, con quien mantiene una pareja consolidada desde hace años. Con una sonrisa en el rostro y dejando entrever la felicidad que la acompaña, Oriana aseguró: “Con Paulo estoy contenta, proyectamos la misma vida que tenemos hace 7 años”.
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Sobre la posibilidad de agrandar la familia, fue clara pero cautelosa. Aunque no hay nada confirmado, no descartó el anhelo: “Será cuando el universo lo diga. Es un proyecto que tenemos, pero no tengo idea cuándo llegará. Si supiera sería Dios”, dijo entre risas, desactivando los rumores de embarazo con buen humor.
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Más seria, explicó por qué evita profundizar en estos temas públicamente: “No me gusta hablar de estas cosas en público porque hay mucha gente mala. Estos proyectos no se cuentan. Hay muchas energías que no conozco y que pueden afectar”. Una declaración que muestra una faceta más introspectiva y espiritual de la cantante. No todo fue armonía durante la entrevista. El momento más incómodo surgió al mencionarse el conflicto con su tía Gabriela Sabatini, con quien mantiene un distanciamiento. La artista prefirió no ahondar en el tema y respondió con visible incomodidad: “No hay nuevos capítulos. Ni idea si no hay solución”.
Intentando cerrar el tema, pidió no continuar hablando al respecto: “Me gustaría no tener que hablar más de esto en cámara, porque no sé, así que no puedo darte mucha más información”, y finalizó con una frase que resume su pesar por la situación familiar: “Lamento que no podamos estar todos juntos en familia”.
A pesar de todo, Oriana se mostró entusiasmada con los proyectos que la traen nuevamente a su tierra natal. “Vengo a Argentina a terminar mi novela. Ojalá el año que viene pueda contarles que va a salir dentro de poco”, adelantó con expectativa. Y también dejó una invitación abierta para sus seguidores: “Vayan a escuchar mis canciones, estoy trabajando en eso”.
Con la serenidad que le da el presente y la esperanza puesta en lo que vendrá, Oriana Sabatini volvió a poner el foco en su carrera sin dejar de lado su vida personal, y aunque algunos temas la incomoden, su mensaje fue claro: sigue proyectando con amor, fe y trabajo constante.
