Pocas figuras despiertan tanto cariño y respeto como Julieta Díaz, una actriz que ha sabido ganarse el corazón del público argentino no solo por su talento, sino también por su honestidad y sensibilidad. En una reciente entrevista radial, la artista dejó de lado el brillo de los escenarios para mostrar su costado más humano y emocional, compartiendo detalles muy personales sobre la salud de su hija y el momento de vida que atraviesa tras su separación.
La confesión más sincera de Julieta Díaz
Durante una charla en Radio con Vos, la actriz habló con una apertura pocas veces vista sobre la realidad que vive como mamá. Conmovida, Julieta Díaz contó: “Nació con parálisis cerebral y a los seis años desarrolló una epilepsia secundaria de la lesión cerebral. Vos podés tener una parálisis cerebral y estar cuadripléjico, o podés tener una parálisis cerebral como mi hija, que es un grado entre uno y dos de seis grados. Ella camina, habla, se conecta, está bien cognitivamente, está en cuarto grado con ayuda, pero…”, reveló.
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Con serenidad y fortaleza, la actriz explicó cómo logra mantener el equilibrio emocional ante los desafíos: “La fuerza la saco primero de que yo tengo una vida muy privilegiada. Por suerte, mi compañero de crianza, que es el padre de mi hija, es una persona no solo muy responsable y muy amorosa: se hace cargo de su parte. No es que me ayuda, sino se hace cargo de la parte que le toca”, expresó, dejando en claro el valor del acompañamiento y la corresponsabilidad.
Además, Julieta reflexionó sobre la desigualdad que atraviesan muchas familias en situaciones similares: “Hay gente que no tiene un mango, que son mujeres que a lo mejor están solas con chicos con discapacidad porque terminan quedándose las madres. Pero hay una parte para las personas que no tienen ni siquiera obra social. Es el Estado que ahí sí tiene que cubrir a la gente más vulnerable. Imaginate, la pobreza más grande y además una discapacidad”, sostuvo con contundencia.
La actriz también compartió un instante de felicidad que marcó su corazón: “Me emocioné porque mi hija estaba llevando su perrito a pasear y para mí fue como me emocioné de la alegría. Y sí, porque hay un montón de cosas que no puede hacer, pero eso lo puede hacer, pudo disfrutar de un perro”, relató con ternura.
En la parte final de la entrevista, Julieta habló sobre su reciente separación del ilustrador uruguayo Gervasio Troche, con quien compartió varios años de relación. “Me separé hace ya 10 meses y estoy muy tranquila, tratando de buscar la tranquilidad, con muchos temas personales, así que busco cuidar mi energía, protegerla y mantenerla”, confesó con la misma transparencia que caracteriza cada una de sus palabras.
Con esta emotiva apertura, Julieta Díaz volvió a demostrar que la verdadera fortaleza está en hablar con el corazón, visibilizando realidades que muchas veces se silencian, pero que merecen ser escuchadas.
