En el universo siempre convulsionado de la farándula argentina, el nombre de Wanda Nara vuelve a ser sinónimo de polémica. Esta vez, no por una pelea con una modelo o un posteo misterioso en redes, sino por algo mucho más serio: una posible investigación fiscal y un nuevo capítulo en su enfrentamiento con Mauro Icardi. Todo esto, mientras en los pasillos de Telefe la tensión crece y las internas se agitan.
Wanda bajo la lupa: Telefe estalla y crece el drama con Icardi
La encargada de encender la mecha fue nada menos que Yanina Latorre, quien reveló en sus redes un dato que sacudió al medio. Según contó, una denuncia formal llegó a las manos de ARCA, el organismo encargado de investigar la actividad fiscal de las figuras públicas. “La están investigando por movimientos raros”, lanzó Latorre, sin filtro.
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Pero eso no fue todo. Según la panelista, este nuevo escándalo cayó muy mal en la señal de las pelotas. “En el canal están furiosos. Muchos turbios y varios personajes complicados”, aseguró, generando un enorme revuelo puertas adentro de Telefe. Por ahora, Wanda guarda silencio absoluto sobre el tema fiscal, aunque su entorno no descarta que en los próximos días salga a responder.
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Mientras tanto, otro frente de tormenta no da tregua: la tensa relación con su ex, Mauro Icardi, escaló a niveles inesperados. Según Ángel de Brito en LAM, Wanda le contó su profunda molestia por una medida que tomó el futbolista respecto a sus hijas. “¿Y qué hago con la pediatra? No puedo ir a la pediatra. ¿Qué hago con el colegio? No pueden ir al colegio. Es una estupidez. Las nenas no pueden ver a las amigas, no pueden ir a equitación”, disparó furiosa Wanda, angustiada por no poder cumplir con las rutinas habituales de sus hijas debido a una decisión impuesta por el jugador.
Desde el otro lado, Icardi no se quedó atrás y apeló directamente al juez que lleva el caso: “Señor juez, se me acaba el tiempo. Estoy a punto de irme a Turquía, o las veo ahora o no las veo más”. Además, reclamó: “Se sirva ordenar que las niñas estén con su padre hasta su viaje a Turquía”.
Todo esto ocurre en un momento clave para Wanda, quien intenta sostener su vida profesional entre contratos, apariciones televisivas y compromisos familiares. Sin embargo, la presión se acumula, los escándalos no aflojan y el futuro legal de la empresaria parece, una vez más, estar en el centro del huracán mediático.